Otra BBQ para celebrar que viene Adrián

Pues nada, la primavera se acercaba y había que celebrar una BBQ antes de que naciera Adrián, porque ya le queda poco a Marta para dar a luz, menos de un mes posiblemente.

Esta vez lo montamos algo mejor, es decir, pusimos pasta por delante, de manera que cuando se fuera a comprar cosas, se tuviera ya dinero de todos, y así las cancelaciones no saldrían tan caras como la última vez. Unos compraron la carne, otros las bebidas para todos, otros fuimos a por pan y el hielo, y otras en este caso, se pusieron como locas a hacer postres.


Había tres, una tarta y dos bizcochos de chocolate todos claro, jejej.

Mientras unos montaban la mesa y sillas en el jardín, los demás nos poníamos manos a la obra con la leña para hacer la BBQ, y después de unos 40 minutos intentando hacer brasa con una mezcla de papel, cartón y ramas, nos dimos cuenta de que eso no iba a llegar muy lejos. El carbón que quedaba en la casa eran casi cenizas y se caían por la base, así que decidimos mandar a Morales a la gasolinera de al lado a por una bolsa más de carbón vegetal.

Mientras llegaba, aprovechamos las brasas para poner el provolone on fire, ya que estábamos con un hambre de muerte, y claro, llenarse solo de aceitunas y snacks no era gran idea. Ese queso está cojonudísimo, y lo recomiendo en cada barbacoa sin duda.


Tras traerlo, el fuego fue mucho más fácil de hacer, ya que se esparció por toda la base y empezaron a hacer llama muy pronto. Sin mas ganas de esperar, empezamos poniendo la carnaza, y cómo no, empezó a soltar grasa y a producir llamas enorme.... claro, la carne fuera otra vez porque se quemaba, jajaja.... bueno, típico de los que no sabemos hacer estas cosas.

Seguimos con el churrasco, al cual no le venían mal soltar grasa con el fuego, luego hicimos butifarras muy ricas, pusimos y pusimos hasta que la gente no podía comer mas.

Mientras íbamos haciendo, los de la mesa nos cortaban carne y nos la iban trayendo para comerla en la propia BBQ,

La verdad que lo pasamos genial, y desde las 12.30 que empezamos a cocinar hasta las 4pm no paramos de comer y beber. El día era una pasada, con más de 20ºC y un jardín enorme. Éramos unos 15 y aún quedaba espacio para mucha mas gente.

Cuando acabamos de reventar, agarramos las sillas, las pusimos al sol y nos íbamos moviendo como los girasoles porque a la sombra hacía algo de frío. Reposamos, contamos chorradas del trabajo, alguno ya iba un poco cocido y algo más (con hierba por medio) y sobre las 18.15 nos pusimos en marcha hacia el tren que pasaba a las 18.42. El siguiente era a las 19 y así sucesivamente cada 20 minutos.

Dado que era domingo, pensamos que era el mejor momento para moverse, ya que Rhea y yo teníamos que volver a Barcelona, ir a su casa y de ahí a la mía cargando con unas cuantas bolsas de ropa. Esta vez sin restos de comida ya que calculamos bien.

Marta embarazada decidió llevarnos en coche a la parada a Rhea, Hugo, la mujer de Hugo y a mí. Tardamos escásamente unos 4 minutos y el tren otros 5 en pasar con dirección Terrasa. Después de 25 minutos, ya estábamos en Sants para enganchar con la línea azul. Ahí mismo nos despedimos de Hugo y Marta que se iban andando a casa.

Buen finde, buena comida, buena compañía, buen inicio de primavera y buenos augurios para un bebé que está a punto de llegar al mundo :)