Saturday, April 16, 2016

Thailand trip: Miércoles 6 de abril

Hoy nos levantamos muy pronto, a las 7:45 para ser exactos ya estábamos en pie, pero como habíamos dormido bastante pues no pasaba nada.

El objetivo, estar abajo en el lobby del hotel a las 8:30am listos para que un taxi nos recogiera y nos dejase en la playa de Au Nang, preparados para el tour de las islas Phi phi.

La verdad que en este hotel el fallo garrafal fueron los desayunos. Nosotros pensamos que sería un lujo tener el desayuno incluido, y encima en la azotea con esas vista, perfecto. Pues fue lo contrario, ya que todo el desayuno era un fallo. La comida llena de hormigas o moscas, la mantequilla derretida completamente, lo que era salado ( huevos, bacon, etc) estaba todo frío, no había tostador, con lo que había que comer las tostadas a pelo. El zumo estaba caliente y este día en concreto picaba sospechosamente y lo tuvieron que retirar por miedo a que estuviera malo, un desastre vamos, pero así comíamos menos mierda al menos.

A las 9am estábamos ya listos para embarcar en una lancha rápida a pie de playa junto con otros 33 pasajeros de todas partes del mundo.
En un principio, nos dijeron que serían 7 islas, pero al final creo que fueron 4 solo. La primera parada fue rápida y pensamos que demasiado, pero era sólo para recoger a 4 que venían desde otra playa cercana.

Nos tocó un guía local bastante gracioso que nos iba contando como iba a transcurrir todo el viaje, las islas en las que íbamos a parar y el orden de ellas. La primera parada, la isla Bamboo (o así lo llamó el guía, aunque en Google esa isla aparece en Cambodia), a unos 25 minutos de la playa. Era una reserva natural para la cual es necesario pagar entrada extra sino lo hiciste con el ticket. Nosotros íbamos completos y nos pudimos bajar sin pagar un solo chavo de más :).


Pese a que el agua era color turquesa y se veía el fondo, la arena seguía siendo de coral, es decir, hacía daño al caminar por ella. Mol, que seguía con sus heridas en el pie, no se pudo bañar y se quedó en la sombra tumbado. Estaba bien, pero estábamos como 10 lanchas rápidas allí paradas y era un poco rollo Imserso pero en el mar, parar, fotos y siguiente.

La siguiente isla tenía que haber sido otra, pero nos dijeron que por motivo de las mareas, si no íbamos en ese mismo instante a la isla Phi Phi Lay, por la tarde no habría agua y no sería lo mismo. Esta playa, para el que no lo sepa, fue donde se rodó la película de Di Caprio "The Beach". Debido a esto, había docenas de barcos y era bastante desagradable bajarse ahí a la playa. El agua estaba azul trasparente, pero cerca de la playa se complicaba un poco el baño, porque se llenaba de mierda de los turistas mezclado con gasolina de las lanchas, las cuales se veían obligadas a salir y entrar de la costa para evitar un efecto embudo.


La verdad que las fotos eran de película y molaba un huevo. Al final de la playa había una especie de chiringuito donde se podía comprar algo de comer y beber, que fue donde estuvo Mol todo el rato al no poder bañarse. Una cosa que no he dicho es que como nadie se podía quedar en el barco, a mol lo teníamos que ayudar a bajarse para no mojarse el pie infectado, jejeje, a caballito.


Como se aprecia en la segunda imagen, había una especie de isla en la parte trasera de la otra, que se denominaba "mushroom island" por su forma de champiñón. Para llegar, había una especie de camino de arena que quemaba que daba gusto, y que acababa en una especie de charca de coral que, sus muertos como dolía para llegar a donde se saca la foto. 

Estuvimos como unos 45 minutos en la isla, y otra cosa que se aprecia es la camiseta que llevamos algunos, porque ya teníamos quemaduras por los hombros, y a esa hora ya le daba el sol de narices. Era casi la hora de comer, sobre la1:30pm o así, y cuando pasó la hora, nos subimos de nuevo a la lancha y camino a la isla de Phi Phi Don a comer.

La isla por supuesto ya estaba petada de lanchas y la nuestra tubo que "aparcar" entre otras 20 ó 30 que había en fila. La orilla de la isla estaba ya preparada con una especie de naves industriales sin paredes, con mesas y sillas para dar de comer a cientos de personas a la vez. La comida era una especie de buffet, con típica comida tailandesa, y como decía nuestro guía, es la única comida del mundo que puede ser salada, dulce, picante y amarga a la misma vez :)

La verdad que teníamos un hambre de la ostia, y comimos sin conocimiento. Yo intenté comer algo que llevase agua, como ensaladas, sandía, etcétera, pero el ansia se me fue de las manos y acabé con una panzada que no era normal. Lo pero de todo es que nos dijeron que justo a continuación nos iríamos a hacer buceo con tubo (joder, qué oportuno!!)


Esta imagen es desde la popa de la lancha rápida justo antes de salir de la isla, justo después de la panzada.

La verdad que los dos sitios donde fuimos de buceo fueron un misterio para mi, o simplemente no lo dijeron, es decir, arrancamos de esta isla y paramos a los 15 minutos en una isla con muchos monos para hacerles algunas fotos, pero sin bajar de la lancha. A continuación, nos fuimos a otra playa, y nos dejaron a unos 50 metros de la orilla, justo encima de una especie de arrecife de coral.

La verdad que me gustaría poner los vídeo aquí porque son una pasada pero ocupan demasiado, así que me los quedo para mi. Venir a Tailandia y no hacer snorkeling es casi un delito, porque los lugares son infinitos y una pasada. Por cerca de entre 700-1000B puedes ir donde sea (estamos hablando sin bombona). Para hacerlos con bombona, hay gente que se lleva el carnet de buceo, aunque ellos dijeron que podían facilitarte unas inmersiones a 15-20m máximo de 4h cada una sin necesidad de licencia.

Después del primer buceo, nos llevaron a otra zona de acantilados de otra isla donde nos soltaron otros 25 minutos, que se me hicieron cortos la verdad. Encima, había otra lancha al lado tirando comida a los peces y aquello de repente, sin esperármelo, me encontré rodeado de cientos de peces de colores con hambre :D.

Un acuario viviente, y yo dentro casi tocando los peces. La imagen vale más que mil explicaciones. Cuando nos mandaron volver a la lancha, estaba cayendo el sol, y nos quedaban unos 30 minutos de vuelta a la playa de Ao Nang. A medida que avanzábamos se veía junto a las rocas de las islas que cruzábamos, cómo la marea había bajado unos 2-3m, con lo que nos dimos cuenta que era verdad lo de que la marea bajaba demasiado.

Esto además lo corroboramos al llegar a nuestra playa, porque literalmente el agua había desaparecido y los barcos se veían obligados a entrar por un canal que habían cavado en la costa, con una especie de barco-taladro, como los que hacen los túneles del metro.
Impresionante, y solo eran las 5pm. Como el barco no podía llegar a la orilla donde nos recogió, nos toco caminar unos 200m hasta el taxi que ya nos estaba esperando para dejarnos en el hotel. Al bajar de la lancha, nos tocó buscar las chanclas, porque no lo dije, pero antes de subir, nos obligaron a meter todas en una bolsa para no ensuciar la lancha, y claro, al final tocaba buscar la pareja, jajaj.

Nos habíamos metido una buena paliza ese día, así que por la noche quisimos ir de cenita tranquila. Algo que yo no supe de la primera noche es que, cada noche, a cada uno le tocaba elegir restaurante, y esa noche era la de Joana. Joana tiene una extraña necesidad de comer basura, y esa noche eligió el McDonalds de la calle principal. Así que nada, todos de camino a comer una hamburguesa y después
a tomar algo.

Yo no conocía nada, pero estos se conoce que ya habían salido varias noches a un karaoke que hay cerca de la playa. Nos sentamos a tomar algo en una bar llamado Chang Bar, y de ahí vuelta al hotel, que nos quedaban unos 30 minutos a pata, eso si, no teníamos mucho sueño, por lo que decidimos tirarnos a la piscina del hotel, jajaja.

Esta es una imagen de mol mientras Joana se tiraba a bomba, jaja, le puso fino y eso que no se podía mojar el pié y se lo dijo...estuvimos hasta las 3am casi y como el día siguiente era día libre, es decir, no teníamos nada pensado, pues aprovechamos, Lo cierto es que se estaba de lujo porque teníamos cerca de 30ºC a esa hora y el agua estaba treméndamente caliente, qué gozada!!!.

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